<img height="1" width="1" style="display:none" src="https://www.facebook.com/tr?id=553900558875844&amp;ev=PageView&amp;noscript=1">

Guía sobre la mediación familiar en Chile

Imagen destacada - Total abogados

Índice

La pensión de alimentos es un derecho: ¡Una guía completa que debes leer!

Pensión de Alimentos

La mediación es el punto de partida para resolver conflictos. En un proceso de mediación familiar, dos personas dialogan con el apoyo de un mediador o mediadora para lograr ciertos acuerdos en materia de cuidado personal, pensión de alimentos, visitas, entre otros.

La mediación evita situaciones sumamente estresantes y complejas para las familias: El desconocido mundo de los tribunales, la complejidad de los juicios y la intervención de abogados producen un desgaste emocional y económico para padres, madres, hijos e hijas y otros miembros de la familia.

Chile ha comprendido correctamente esta realidad, pasando la mediación familiar a ser un pilar fundamental para resolver conflictos.

Si estás atravesando por un proceso de separación y no sabes por dónde partir, en Total Abogados te recomendamos que puedas revisar con mucha atención esta guía sobre la mediación familiar en Chile: donde todo comienza.

¿Qué es la mediación familiar?

La mediación es un proceso de negociación guiada por un mediador familiar, donde las partes se sientan a conversar con el fin de llegar a  ciertos acuerdos.

La mediación familiar es un sistema válido y legalmente reconocido en Chile para resolver conflictos. Estos conflictos se extrapolan a las situaciones más recurrentes que existen entre los integrantes de una familia.

En Chile es una instancia previa y obligatoria al inicio de un proceso judicial. Sobre este punto te contaremos más adelante.

¿Qué es un mediador familiar en Chile?

Los mediadores o mediadoras familiares son personas que cuentan con una especialización y preparación técnica para orientar y guiar a las personas a alcanzar acuerdos.

Generalmente son abogados o abogadas, psicólogos o asistentes sociales con especialización en derecho de familia, técnicas de resolución de conflictos y herramientas de comunicación efectiva.

Estos acuerdos evitan iniciar una demanda en un tribunal de familia, ya que son figuras imparciales y neutrales. No toman partido por uno u otro, sino que velan porque las partes se encuentren informadas y en igualdad de condiciones.

No cualquier persona puede ser mediador. Para poder desempeñar sus funciones tienen que estar inscritos en Registro de Mediadores/as que administra el Ministerio de Justicia y Derechos Humanos.

Es importante entender que existen mediadores públicos y privados. Para acceder a la mediación pública se deben cumplir ciertos requisitos enfocados a la capacidad económica del solicitante.

En Total Abogados contamos con una red de mediación particular a nivel nacional con especial foco en escuchar y fomentar un diálogo constructivo entre las partes.

¿Qué materias se ven dentro de un proceso de mediación familiar?

En Chile existen 3 materias de mediación previa y obligatoria:

Cuidado personal (tuición)

A través de un proceso de mediación se puede fijar que el cuidado personal quede a nombre del padre, la madre o ambos. Incluso en algunos casos excepcionales, a nombre de un tercero.

Pensión de Alimentos

Una de las materias más recurrentes que se regulan a través de procesos de mediación  son los alimentos que se deben a los hijos. Dentro de un proceso de mediación por alimentos es obligatorio resolver las siguientes solicitudes antes de iniciar una demanda:

Demanda por pensión de alimentos

Generalmente frente a un proceso de separación reciente, las personas optan por regular un monto de pensión de alimentos por primera vez.

Los mediadores fijan el monto en UTM, envían el acta al tribunal de familia y con eso se ordena la apertura de la cuenta bancaria interconectada con el tribunal.

Aumento de pensión de alimentos

Si el monto de la pensión alimenticia es insuficiente y existen nuevos antecedentes que justifiquen la necesidad de considerar un aumento en el monto de la pensión, se debe intentar primero regular por un proceso de mediación.

Acá se recomienda fundamentar los motivos específicos por los cuáles se hace relevante aumentar el monto.

Rebaja de pensión de alimentos

Si la persona que paga alimentos sufre un detrimento en su capacidad económica o si las necesidades de la persona que recibe alimentos disminuyen considerablemente, se debe intentar la mediación para reducir el monto original.

Cese de pensión de alimentos

Independientemente de que se puedan cumplir los requisitos legales para que cese de la pensión de alimentos, se debe intentar abordar a través de un proceso de mediación familiar. 

Relación directa y regular (visitas)

Las visitas del padre, madre o abuelo que no tienen el cuidado personal se deben regular primero por un proceso de mediación. Solo en el evento de no llegar a un acuerdo, debe correr la opción de interponer una demanda ante el juez de familia.

El hecho de que existan materias del derecho de familia que se les exija una mediación previa y obligatoria no significa que se deben necesariamente regular por esta vía. 

La obligatoriedad radica en que antes de iniciar una demanda en un tribunal de familia, tiene que existir un intento de llegar a un acuerdo extrajudicial a través de un proceso de mediación.

La razón detrás de esta lógica tiene que ver con las opciones de lograr un acuerdo. Estos acuerdos permiten a los integrantes de un grupo familiar evitar la exposición a un juicio, con los costos emocionales, económicos y de tiempo que éstos pueden acarrear.

Además, aliviana la carga de los tribunales de familia, pudiendo éstos centrarse en procesos más complejos.

¿Qué ocurre en un proceso de mediación?

Dentro de un proceso de mediación hay dos alternativas:

Que las partes lleguen a un acuerdo:

Si dos personas que se someten a un proceso de mediación, logran alcanzar un acuerdo, el mediador o la mediadora familiar debe emitir un Acta de Mediación firmado por las partes.

Este certificado es enviado por el mediador al tribunal de familia para que tenga la misma validez que una sentencia dictada por un juez.

El acuerdo se formaliza sin tener que atravesar por un proceso judicial, pero con los mismos efectos legales y posibles sanciones frente a un incumplimiento.

Que las partes no lleguen a un acuerdo

Es posible que las partes no lleguen a un acuerdo. Dentro de esta posibilidad, existen dos posibles escenarios:

Que una o ambas partes no se presenten a la audiencia con el mediador

En caso de inasistencia de uno o ambos intervinientes, el mediador debe dejar constancia en el acta de esta circunstancia, y emitir un certificado de mediación frustrada.

Generalmente las inasistencias son un reflejo de la no disposición para dialogar y lograr una solución no judicial al problema.

Que asistiendo ambas partes, no logren un acuerdo

Es posible que las partes asistan, pero tengan pretensiones incompatibles con la opción de un acuerdo. En ambos casos, el mediador o mediadora emite un Certificado de Mediación Frustrada.

Este certificado es fundamental para poder iniciar una demanda. La ley exige que el certificado tenga una virgencita no superior a los 6 meses. De lo contrario, se debe intentar una nueva instancia de negociación.

¿Puedo ir a la mediación con mi abogado?

Esta es una pregunta muy recurrente. Lo primero que debes comprender, es que en un proceso de mediación no es necesario comparecer con un abogado o abogada.

A diferencia de la mayoría de las actuaciones que se realizan en los tribunales, estos procesos son distintos. Buscan un diálogo colaborativo menos formal.

Un mediador familiar puede rechazar o impedir que comparezcas con un abogado si la otra parte va sola.

La razón detrás de esta lógica es simple y radica en que existe un principio de igualdad, donde se busca que ambas partes estén en posiciones equitativas para poder lograr acuerdos.

Si una parte se presenta con un abogado y la otra no, claramente existe una desventaja e inequidad de condiciones que altera el proceso.

¿En qué casos no puedo ir a mediación?

Si bien existen materias que no se resuelven por mediación, como el divorcio (aunque sea de mutuo acuerdo), existe la prohibición de alcanzar un proceso de mediación familiar frente a existencia de un proceso vigente por violencia intrafamiliar.

En esos casos, el mediador debería declarar inmediatamente el proceso como frustrado. 

¿Cuáles son las ventajas de un proceso de mediación?

Un proceso de mediación tiene muchas ventajas que es importante considerar:

Rapidez

Sin duda que la mediación es un proceso mucho más rápido y sencillo que someter una materia a una decisión judicial. El acuerdo que se alcanza y que equivale a una sentencia se obtiene en un periodo de tiempo muchísimo más breve que si el asunto lo revisara un juez de familia.

Economía

Concurrir a un proceso de mediación es más económico que ir a juicio. Independiente si es mediación pública o particular, al tratarse de un proceso no judicial tiene menos costos.

Equidad

Los procesos de mediación cuentan con estándares de equidad entre las partes. Generalmente se practican sin abogados de por medio, por lo que se hace más igualitaria la posición de cada parte. Además, el mediador o mediadora maneja neutralidad e imparcialidad que fortalece este principio.

Transparencia

La mediación es un proceso transparente en que ambas partes saben que si no llegan a acuerdo, pueden tomar un camino judicial. Además, el mediador les reporta a ambos el resultado del proceso, ya sea si se frustró o si se logró un acuerdo (y en este último caso el detalle del mismo). 

Confidencialidad

Las instancias de mediación son confidenciales. Sólo pueden asistir las partes interesadas y el mediador mantiene la obligación de no difundir las conversaciones que surjan durante el proceso.

Generalmente en materia de familia se exponen muchas situaciones íntimas que tienen que ver con relaciones de pareja, y asuntos personales de los hijos en común.

Por eso las personas que se someten a este proceso cuentan con el compromiso de discreción del mediador o mediadora.

Consejos para enfrentar un proceso de mediación familiar

Si bien la instancia de mediación tiene muchas ventajas sobre un proceso judicial, es importante seguir algunos consejos claves para proteger tus intereses y los de tu círculo familiar.

Informarse

¡La información es poder! Si estás próximo a evaluar la alternativa de una mediación es importante buscar contenido confiable para entender en qué consiste el proceso, cómo funciona y cuáles son las consecuencias.

Además de entender el sistema, es clave comprender las materias del derecho de familia que buscas regular. 

En Total Abogados contamos con canales de información muy valiosos, como el blog y nuestro canal de youtube.

Buscar asesoría

La información por sí sola no es suficiente. Tú caso es distinto al de los demás. Es fundamental que puedas evaluar una asesoría con un abogado o abogada experta en derecho de familia. Esta asesoría te entregará importantes herramientas para presentarte a un proceso de mediación con mayor confianza y seguridad.

Disposición

Si te vas a enfrentar a un sistema de resolución de conflictos no judicial, es muy importante contar con una disposición de diálogo para lograr acuerdos.

Escuchar, dejar de lado las diferencias que no construyen y colaborar con el proceso, son puntos claves para lograr acuerdos.

Plan  B

En todo proceso de negociación, se debe considerar cuáles son tus pretensiones y cuál es tu punto límite para lograr un acuerdo.

Esa diferencia es importante, ya que el límite de tu negociación no debe ser sobrepasado por la presión de llegar a un acuerdo. El acuerdo tiene sentido en la medida en que a tí te haga sentido y sea viable cumplirlo.

Entender las consecuencias

Si bien la  mediación contiene una carga y formalidad menor que un proceso judicial, su resultado  tiene la misma obligatoriedad que una sentencia.

Muchas personas no comprenden este punto y se comprometen a situaciones que se les hace imposible de cumplir.

Ojo con este punto. Si regulas a través de un proceso de mediación el pago de una pensión de alimentos que es más alta de lo que efectivamente puedes aportar, el resultado del proceso tendrá exactamente la misma validez que el fallo de un juez frente a una demanda. Si no cumples con el pago comprometido, podrías verte expuesto a importantes apremios y sanciones.

Conclusiones

La mediación es un mecanismo extrajudicial para resolver conflictos que surgen en una dinámica familiar. A través de un proceso de mediación familiar, dos personas se sientan a dialogar con el fin de arribar a acuerdos. Estos acuerdos tienen la misma validez legal que una sentencia.

Un proceso de mediación tiene múltiples beneficios para las personas y su entorno. Además, es una herramienta efectiva para liberar a los tribunales de sobrecarga.

El proceso de mediación es mucho más expedito que un juicio y por lo mismo hay que tener especial cuidado en los acuerdos que se alcancen, ya que estos tienen validez judicial y su incumplimiento puede acarrear importantes apremios y sanciones.

La mejor forma para lograr un buen acuerdo es informarse y asesorarse con abogados especialistas en la materia.

En Total Abogados contamos con la posibilidad de obtener asesorías legales especializadas y en un tiempo breve. Además, contamos con una red colaborativa para ofrecer procesos de mediación confiables y enfocados en lograr resultados colaborativos.

Copia de Visuales_Mesa de trabajo 1 copia 6

Solicita tu asesoría legal sobre pensión de alimentos

    Compartir articulo:

    Suscríbete a nuestro Newsletter

     

    Encuentra lo que buscas aquí

      CTA